
Washington, D.C.-
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes una controvertida orden ejecutiva que busca negar la ciudadanía automática a los hijos de migrantes indocumentados nacidos en suelo estadounidense. La medida pretende modificar la interpretación actual de la Enmienda 14 de la Constitución, que desde 1868 garantiza la ciudadanía a toda persona nacida en territorio nacional.
Una medida con alto impacto legal y social
El gobierno aclaró que la orden ejecutiva aplicará únicamente a nacimientos futuros. Sin embargo, expertos en derecho constitucional advierten que enfrentará desafíos legales inmediatos. La Enmienda 14 ha sido históricamente interpretada como un derecho fundamental, lo que convierte esta decisión en un punto de conflicto legal significativo.
Organizaciones como la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) ya han presentado demandas, alegando que la orden no solo viola la Constitución, sino que también discrimina y estigmatiza a los niños nacidos en Estados Unidos.
"Esta medida condena a los niños afectados a una vida sin derechos plenos, privándolos de la posibilidad de votar, trabajar legalmente o participar activamente en la sociedad estadounidense", expresó la ACLU en un comunicado.
Promesa de campaña y apoyo de sectores conservadores
La medida revive una vieja promesa de Trump desde su primer mandato, cuando amenazó con emitir una orden similar sin concretarla. Este paso refuerza su postura política frente a los sectores conservadores que abogan por endurecer las políticas migratorias.
Según el Centro de Investigación Pew, al menos 1.3 millones de adultos nacidos en Estados Unidos tienen padres indocumentados. Bajo la actual interpretación de la Enmienda 14, estos ciudadanos gozan de todos los derechos constitucionales, incluidos el voto y la protección legal.
Un desafío constitucional
Modificar el derecho a la ciudadanía por nacimiento requeriría, en teoría, una enmienda constitucional, lo que implicaría un proceso legislativo arduo que incluye la aprobación por dos tercios del Congreso y la ratificación de tres cuartas partes de los estados.
En lugar de buscar este cambio legislativo, la administración Trump parece apostar por una reinterpretación judicial de la Enmienda 14, abriendo la puerta a un prolongado enfrentamiento legal que podría llegar hasta el Tribunal Supremo.
Este controversial movimiento no solo marcará el rumbo de las políticas migratorias en Estados Unidos, sino que también podría redefinir la manera en que el país aborda el concepto de ciudadanía.
Comments