Desde a finales del mes de noviembre las calles, mercados y locales comenzaron a inundarse de plantas de Nochebuena, lo cual fue el banderazo de la naturaleza para abrir paso a toda la decoración, preparación y festejos navideños que tanto nos encantan.
De acuerdo con información del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) la flor de nochebuena, es originaria de México.
Cuetlaxóchitl, es su nombre en náhuatl y significa flor de cuero. La Cuetlaxóchitl era una planta de ornato muy apreciada por los aztecas y ocupaba un lugar muy especial en los jardines de Nezahualcóyotl y Moctezuma.
Consejos para conservar tu planta de nochebuena
La nochebuena, es una planta de sombra, por lo que es perfecta para todos los espacios dentro de las casas y en general de cualquier lugar sombreado; evita la exposición al sol.
Estas necesitan ser regadas cada tercer día, solo trata de humedecer la tierra, pero no llenes la maceta de agua. Otra mejor opción es el riego por inmersión.
Si miras que la planta empieza a marchitarse o alcance los 40 centímetros de alto, lo mejor que podemos hacer es trasplantarla para darle una segunda oportunidad de vida, también será necesario cortar dos terceras partes de sus tallos y podando las partes muertas de la planta.
A partir del mes de octubre es importante que mantengas tu planta a la sombra al menos 10 horas al día para que sus hojas verdes cambien a rojas en los meses siguientes.
Uno de los consejos más relevantes que debemos saber es que no se deben rociar las hojas, ya que esto podría ocasionar que se mancharan o que se decoloren.
Si notas que las hojas se ponen amarillas, es probable es que les falte luz indirecta, nitrógeno o que estén recibiendo demasiada agua.
Las nochebuenas, llamadas científicamente Euphorbia pulcherrima o Flor de Navidad, Estrella de Navidad, Santa Catalina, Flor de Pascua y Flor de Fuego, son un regalo que México le dio al mundo para la Navidad.
En México, cada 8 de diciembre, se celebra el Día Nacional de la Nochebuena.
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