¡POLÉMICA MUSICAL! GOBIERNO DE SONORA LLAMA A FRENAR CORRIDOS QUE ENALTECEN AL CRIMEN

Hermosillo, Sonora.-

En medio del creciente debate sobre los corridos tumbados y narcocorridos, el secretario de Gobierno de Sonora, Adolfo Salazar Razo, lanzó un llamado a la conciencia colectiva, instando a compositores y consumidores de este género a reflexionar sobre el contenido que se promueve y su impacto social.

Durante su declaración, Salazar subrayó que, si bien Sonora es un estado que respeta la libertad de expresión, esta no debe ser excusa para glorificar a organizaciones criminales a través de la música. “Los padres de familia tenemos que poner mucha atención en lo que consumen nuestros hijos. Este tipo de contenido no ayuda, no favorece y entorpece los esfuerzos por construir una sociedad en paz”, enfatizó.

El funcionario expresó su respaldo a las medidas que ya han comenzado a tomarse en otros estados del país, donde se ha restringido la difusión de este tipo de música en espacios públicos y medios de comunicación.

A esta postura se sumó Víctor Hugo Enríquez García, titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) en el estado, quien fue tajante al manifestar su rechazo hacia los temas musicales que enaltecen la vida delictiva. “Antes, los corridos hablaban del héroe, del policía que hacía bien su trabajo. Hoy se glorifica al delincuente, y eso es parte del problema que enfrentamos como sociedad”, declaró.

Respecto a las críticas de censura y posibles violaciones a la libertad de expresión, Enríquez García aclaró que no se trata de prohibir ideas, sino de no fomentar conductas que afectan la seguridad y los valores de la sociedad. “No podemos permitir que se normalicen las actividades criminales en nombre del entretenimiento”, puntualizó.

El debate está más vivo que nunca, y tanto autoridades como ciudadanos se encuentran en medio de una discusión clave sobre hasta dónde debe llegar la libertad artística cuando se trata de temas sensibles como el crimen organizado. Por lo pronto, el llamado del gobierno sonorense es claro: la música también debe ser parte del esfuerzo por construir una cultura de paz.