La prevalencia de consumo de tabaco entre los adultos mexicanos se mantuvo sin cambios entre 2009 y 2023, revela la Encuesta Global de Tabaquismo en Adultos (GATS) elaborada por la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama).
Pese a las prohibiciones legales para reducir su consumo, la encuesta reveló que para 2023 15.6 por ciento de los adultos mexicanos consumen tabaco (fumado, sin humo y productos de tabaco calentado). En números absolutos, se trata de 14.6 millones de personas.
Por sexo, 24.3 por ciento de los hombres y 7.4 por ciento de las mujeres usan actualmente tabaco.
En los 13 años de análisis, la prevalencia de consumo de tabaco o tabaco calentado ha tenido una prevalencia de 16.6 por ciento sin cambios repentinos.
El mismo informe registra que tampoco se observan cambios en la prevalencia de fumadores en el mismo período.
La investigación toma como punto de partida el año 2009 ya que en 2008 entró en vigor la Ley General para el Control del Tabaco (LGCT), definiendo el marco legal vigente para el control, fomento y vigilancia de los productos del tabaco, así como la protección contra la exposición al humo de tabaco.
Sí disminuyó la exposición de humo en espacios públicos
Un resultado alentador del GATS es que entre 2009 y 2023 se registró una disminución significativa en la exposición al humo de tabaco de segunda mano en hogares (17.3 por ciento a 11.9 por ciento por ciento) y en espacios públicos.
Otros sitios donde disminuyó la exposición al humo de tabaco fueron los lugares de trabajo, el transporte público, los edificios gubernamentales, restaurantes y clubes nocturnos.
Además, entre 2015 y 2023 se observó una disminución significativa en la exposición al humo de tabaco en universidades (42.4 por ciento a 33.5 por ciento) y escuelas (13.7 por ciento a 11.2 por ciento).
Esta disminución tiene sus bases en varias políticas públicas. La primera fue en el 2009, cuando se publicó el Reglamento de la Ley General para el Control del Tabaco (RLGCT), ordenamiento que regula la prohibición de fumar en espacios públicos cerrados, incluidos restaurantes, bares y lugares de trabajo. Entre 2008 y 2015 se aprobaron 15 leyes estatales de ambientes 100 por ciento libres de humo de tabaco.
A finales de 2021 entró en vigor una nueva modificación que incluye soluciones, mezclas, cartuchos y/o unidades desmontables de tabaco. En 2022 se emitió un decreto presidencial para reforzar la prohibición de la circulación y comercialización en el interior de la República
Según el GATS, este consumo implica un gasto promedio mensual en cigarrillos manufacturados de 474.9 pesos mexicanos.
La Conasama indica que este tipo de estudios ayuda a visualizar aciertos y errores en las políticas públicas para enfrentar el tabaquismo, adicción que puede traer daños físicos y emocionales.
Según el Gobierno de la Ciudad de México, el cigarro contiene más de 4 mil sustancias tóxicas. Una de ellas es la nicotina, que es la que hace adicta a una persona que fuma.