ENDURECEN REQUISITOS PARA OBTENER CIUDADANÍA ESTADOUNIDENSE: EXAMEN MÁS DIFÍCIL, MÁS BIOMÉTRICOS Y REVISIÓN DE REDES SOCIALES

Washington, D.C.-

Obtener la ciudadanía estadounidense será más complicado a partir de este año. El Servicio de Migración y Ciudadanía de Estados Unidos (USCIS) anunció una serie de medidas que endurecen el proceso de naturalización, con cambios en el examen de inglés y civismo, así como una mayor vigilancia en la recolección de datos biométricos y revisión de antecedentes digitales.

Examen cívico más riguroso

Actualmente, los solicitantes deben responder correctamente seis de diez preguntas de civismo seleccionadas de una lista de 100. Sin embargo, el director del USCIS, Joseph Edlow, adelantó que el formato será modificado porque “es demasiado sencillo memorizar respuestas”.

“Tal y como está planeado ahora, el examen no es muy difícil. No creo que estemos cumpliendo realmente el espíritu de la ley”, afirmó en entrevista con The New York Times.

Más biométricos y control permanente

El Consejo Americano de Inmigración (AIC) advirtió que desde el 11 de agosto el USCIS retomó una regulación que permitirá recolectar hasta 60% más de datos biométricos. Además de las huellas digitales, se incorporarán escaneo de iris, huellas de palmas, ADN y huellas de voz.

De acuerdo con el AIC, esta medida supone “un riesgo para la privacidad y las libertades civiles”, ya que facilita la creación de millones de perfiles de inmigrantes y no ciudadanos bajo un sistema de “verificación migratoria continua”.

Evaluación de “antiamericanismo”

Otro cambio anunciado el 19 de agosto permite a los oficiales considerar actitudes, conductas o vínculos “antiamericanos” como un factor negativo en solicitudes de naturalización y otros beneficios migratorios, como el parole.

“Los beneficios de Estados Unidos no deben dársele a quienes promuevan ideologías antiamericanas. Estamos comprometidos con verificaciones rigurosas e investigaciones de seguridad”, declaró Matthew Tragesser, portavoz del USCIS.

La agencia también adelantó que la revisión de redes sociales de los solicitantes será más amplia, con el fin de detectar posibles publicaciones o interacciones que puedan interpretarse como contrarias a los valores estadounidenses.

Con estos ajustes, el proceso para alcanzar la ciudadanía estadounidense se vuelve no solo más exigente en lo académico, sino también más intrusivo en términos de privacidad y monitoreo personal.