El bicarbonato de sodio se ha convertido en una tendencia de salud, prometiendo desde mejorar el rendimiento físico hasta aliviar la acidez. Pero, ¿qué hay de cierto en estas afirmaciones? Descubre los beneficios reales, así como los posibles riesgos y por qué los expertos advierten sobre su consumo excesivo.
Beneficios del bicarbonato de sodio, ¿mito o realidad?
El bicarbonato no solo sirve para limpiar la casa, también beneficia a la salud.
Y es que en los últimos años se le ha dado un uso más allá de la cocina. Cada vez más personas lo incorporan a su rutina diaria con la esperanza de mejorar su salud y bienestar debido a los beneficios que le ofrece a la salud, algunos de ellos son:.
Mejora del rendimiento deportivo: Numerosos estudios han demostrado que el bicarbonato de sodio puede aumentar el rendimiento en ejercicios de alta intensidad y corta duración al neutralizar la acidez muscular.
Alivio de la acidez estomacal: Al ser una sustancia alcalina, el bicarbonato de sodio puede ayudar a neutralizar el ácido estomacal y aliviar síntomas como la acidez y el reflujo.
Potencial en el tratamiento de enfermedades renales: Algunas investigaciones sugieren que el bicarbonato de sodio podría ralentizar la progresión de la enfermedad renal crónica al ayudar a los riñones a eliminar mejor los ácidos.
Los riesgos ocultos del bicarbonato de sodio
Pese a que es beneficioso, se recomienda su consumo con moderación.
Aunque los beneficios del bicarbonato de sodio son atractivos, es importante conocer sus posibles efectos adversos:
Alcalosis metabólica: Consumir grandes cantidades de bicarbonato de sodio puede alterar el equilibrio ácido-base del cuerpo, causando alcalosis metabólica, una condición que puede llevar a problemas cardíacos, confusión y otros síntomas graves.
Hipernatremia: Un exceso de sodio en el cuerpo, como el que puede ocurrir al consumir grandes cantidades de bicarbonato de sodio, puede provocar hipernatremia, una condición que puede causar deshidratación, convulsiones e incluso la muerte.
Daño renal: El consumo prolongado y excesivo de bicarbonato de sodio puede sobrecargar los riñones y empeorar las condiciones renales preexistentes.
Consulta al médico antes de consumirlo
Antes de incorporar el bicarbonato de sodio a tu rutina diaria, es fundamental consultar a un médico, especialmente si tienes alguna condición médica preexistente como enfermedades cardíacas, renales o hipertensión.
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