Hermosillo, Sonora.-
Durante el 2022, la aplicación de vacunas en Sonora, en el sector público de salud, disminuyó en un 24.12%, dejando desprotegidos principalmente a recién nacidos y a adultos mayores de 60 años, es decir dos de los grupos más vulnerables.
A través de una solicitud de información realizada en la Plataforma Nacional de Transparencia, la Secretaría de Salud del Estado informó que durante el año pasado se aplicaron un millón 513 mil 293 dosis de diversos biológicos, mientras que durante el 2021, año pospandemia, fueron casi 2 millones.
El biológico que menos se aplicó es el antineumocócica 23 serotipos, el cual es para adultos mayores de 65 años de edad y protege de la meningitis, así como de la neumonía.
El registro indica que hace dos años se vacunó a 45 mil 656 personas, mientras que el año pasado solo fue 3 mil 493, una disminución del 92.3%.
Otra vacuna que se dejó de aplicar en gran número es la de hepatitis B, misma que se prescribe al nacer, pero disminuyó en un 79.3%.
Los niños de meses de nacido también dejaron de ser vacunados en un 29.3% contra la poliomielitis, 37% contra el rotavirus, 40% para neumococo y en un 59% en la triple viral que protege de sarampión, rubéola y paperas.
De manera contraria, la dosis biológica antiinfluenza estacional fue de las más aplicadas, con la vacunación de 756 mil 576 personas, pero aun así fue menor al 2021, ya que disminuyó en un 9%.
Los beneficiarios fueron principalmente recién nacidos, embarazadas, personal del Sector Salud, mayores de 60 años y población con comorbilidades.
Así como la vacuna doble viral, aplicada a mayores de 10 años sin antecedentes vacunales. Se pasó de 12 mil 409 dosis a 51 mil 372, un 313% más.
Mientras que durante 2022, al reactivarse de nueva cuenta las clases en las escuelas de manera presencial, la Secretaría de Salud de Sonora retomó la campaña de vacunación contra el Virus del Papiloma Humano, el cual es recibido por adolescentes de primero y segundo año de educación secundaria, o bien, en jovencitas de 13 y 14 años.
Aplicándose un total de 18 mil 322 biológicos, en diversas escuelas y centros de salud.
El sector que no quedó desprotegido fue el de mujeres embarazadas, quienes durante todo el año recibieron refuerzos contra la difteria, tétano y tosferina, así como influenza estacional.
También hubo incremento en la aplicación de vacunas en contra de la Hepatitis B, antivaricela y tuberculosis.
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